Gilbert y Sullivan son dos habitantes de un pequeño archipiélago en medio del océano donde sus residentes viven en casas flotantes con un pequeño muelle cada una. Sullivan es músico y toca el fiscornio. Estudia y ensaya sin descanso en el muelle de su casa. Gilbert es el cartero del archipiélago y se dedica a repartir puntualmente los paquetes que cada mañana le llegan desde el cielo . Una mañana, durante el reparto, Gilbert siente una atracción especial por uno de los paquetes que debe entregar. Este es un paquete con destino a su vecino Sullivan. Inexplicablemente, esa mañana, Gilbert elude su deber decide no entregar la caja a su destinatario. Esa decisión cambiará el rumbo de su amistad para siempre.