Excava tu guarida. Cepilla tu pelaje. Afila tus colmillos. Aparéate. Sé una marmota. Aparéate. ¡Eres una marmota!
Cuando se ansía lo que no se tiene, la única forma de conseguirlo es tomarlo por la fuerza.
Una obsesión por completar una transformación con las piezas de un puzle suave y siniestro.